LE ROCHER DES VIOLETTES- MOUNTLOUIS- SUR- LOIRE, FRANCIA

Xavier Weisskopf, nacido en Picardia al norte de Francia, inició su carrera centrándose en los estudios agrícolas en Chablis. Sin embargo, fue justo durante sus estudios agrícolas en Chablis donde desarrolló una pasión por la viticultura. Su trayectoria continuó en Beaune, donde desarrolló sus habilidades en la vinificación. Los años de formación de su carrera los pasó bajo la tutela de Louis Barruol en el renombrado Chateau de Saint Cosme en Gigondas. En poco tiempo, Xavier ejerció como chef du cave y elaboró ​​cuatro cosechas durante su mandato.

En 2005, decidió crear su propia bodega, Le Rocher des Violettes en Tourane, a las afueras de St-Martin le Beau, con viñedos viejos de Chenin y Côt. Xavier tenía una vision muy clara para su nueva bodega: elaborar vinos con claridad, concentración y precisión láser. La elección de Touraine fue motivada por gran aprecio de Xavier por el Chenin Blanc, llevándolo a Montlouis, donde obtuvo 7 hectáreas de viñas antiguas, muchas plantadas antes de 1940, y algunas con más de un siglo de antigüedad. La propiedad incluía una bodega dentro de una cueva de piedra calcárea tuffeau, brindando condiciones óptimas para la vinificación, como una humedad y temperatura constantes.

Hoy en día, Rocher de Violettes se compone de 15 hectáreas distribuidas en 9 pequeñas parcelas (lieux-dits) en las denominaciones Montlouis y Touraine. Estos 9 lieux-dits son cultivados con vides desde los 5 años hasta las más antiguas, que datan del primer replanteo después de la filoxera y se acercan a los 130 años. En su mayoría, los vinos de la bodega provienen de un solo terruño, y las vides más jóvenes se propagan mediante selección masal. El tipo de suelo predominante es arcillo-calcáreo con cantidades variables de grava, sobre un fondo de roca tuffeau (piedra calcárea).

Siguiendo sus principios de sostenibilidad, la viticultura está certificada como orgánica por Ecocert desde 2012, y la cosechas se realizan de forma manual. Las fermentaciones ocurren de forma espontánea en tanques de acero inoxidable o, predominantemente, en barricas viejas de roble francés para crear vinos de Chenin con un carácter pulido.

Xavier Weisskopf es reconocido por su meticuloso trabajo en el viñedo, lo que resulta en vinos de excepcional complejidad aromática, precisión, pureza, claridad y elegancia impeccable. Con seguridad podemos decir que el resurgimiento de Mountlouis-Sur-Loire y la Chenin Blanc tiene un protagonista en Xavier y su bodega Le Rocher des Violettes.